E n ocasión de Watches and Wonders 2024, Rolex aporta, con sus últimas creaciones, una nueva apariencia a algunos de sus modelos más emblemáticos. Ofreciendo armonías únicas de materiales, colores y texturas, los modelos 2024 ilustran el deseo de despertar constantemente las emociones relojeras. Los nuevos relojes juegan con los contrastes para lograr un equilibrio armonioso entre funcionalidad y estética, rendimiento y preciosidad, tradición e innovación. Demuestran un compromiso inquebrantable con la calidad que se ve expresada en los detalles más pequeños y a través del dominio de habilidades poco comunes, como el arte de fabricar esferas.
Preciosa y técnica, majestuosa e innovadora, la nueva modalidad del Oyster Perpetual Rolex Deepsea está concebida para iluminar incluso el fondo del mar. Por primera vez, este reloj de submarinismo está disponible en oro amarillo de 18 quilates y luce un bisel con disco Cerachrom graduado 60 minutos en cerámica azul, así como una esfera lacada azul, realzada con la inscripción «DEEPSEA» en amarillo empolvado. Esta nueva versión incorpora además una innovación técnica: la anilla de compresión de alta resistencia del sistema Ringlock es de cerámica. Esta anilla Cerachrom, una auténtica obra maestra de la precisión, es el resultado de un proceso de fabricación innovador. Esta pieza azul, que presenta un acabado satinado circular y unas inscripciones grabadas y posteriormente recubiertas de oro, representa una nueva manera de integrar la cerámica en la caja de un reloj: las propiedades de resistencia a la compresión y a la deformación de este material de alta tecnología contribuyen a la hermeticidad del reloj.
El reloj de las zonas abisales
El Rolex Deepsea ilustra a la perfección la capacidad de innovación de Rolex. Con una hermeticidad garantizada hasta 3900 metros, este reloj de buceo profundo, que se presentó en 2008, inauguró el sistema Ringlock, una arquitectura de caja inédita que le permite soportar la presión reinante a esa profundidad extrema. Haciendo gala de los códigos estéticos y las características fundamentales de los relojes Profesionales de la colección Oyster Perpetual, el Rolex Deepsea responde a las más elevadas exigencias de los buzos profesionales en materia de resistencia a la presión submarina, precisión y fiabilidad.
Legibilidad y Funcionalidad
En las profundidades marinas, poder leer la hora sin equívoco es una cuestión de supervivencia. Se le ha prestado una gran atención a la legibilidad del Rolex Deepsea: este reloj destinado al submarinismo profesional presenta una esfera de refinado diseño y cuenta con visualización Chromalight. Los índices con formas geométricas elementales –triángulo, círculo y rectángulo– y las agujas, claramente diferenciadas por su tamaño y su forma, están rellenos o cubiertos de un material luminiscente de larga duración (color de emisión azul) que permanece hasta el doble de tiempo que los materiales fosforescentes clásicos. Sobre el bisel, el «cero» de la graduación, marcado con un triángulo, resulta visible en la oscuridad gracias a un chatón, encajado en la carrura, que contiene el mismo material luminiscente.
El Rolex Deepsea está equipado con el calibre 3235, un movimiento a la vanguardia de la tecnología relojera que le permite mostrar la fecha además de las horas, los minutos y los segundos. Como todos los relojes Rolex, el Oyster Perpetual Rolex Deepsea cuenta con la certificación de Cronómetro Superlativo, que garantiza su excelente rendimiento en la muñeca.
El Rolex Deepsea en oro amarillo de 18 quilates está dotado de un brazalete Oyster. Desarrollado a finales de la década de 1930, este brazalete metálico de tres elementos destaca por su solidez y sigue siendo el más extendido de la colección Oyster Perpetual. El brazalete Oyster del Rolex Deepsea está equipado con un cierre de seguridad desplegable Oysterlock, que previene cualquier apertura involuntaria, y dispone del sistema de extensión Rolex Glidelock. Desarrollado por la marca y patentado, este ingenioso dispositivo de cremallera, integrado en el cierre, permite un ajuste preciso de la longitud del brazalete sin necesidad de herramienta alguna. El Rolex Glidelock del brazalete Oyster cuenta con diez muescas de unos 2 mm cada una; permite ajustar fácilmente la longitud del brazalete unos 20 mm. El brazalete Oyster del Rolex Deepsea en oro amarillo de 18 quilates incorpora, en el interior de sus eslabones, inserciones de cerámica –diseñadas por la marca y patentadas– para aumentar su fluidez de uso y su longevidad.
